En el norte de Kenia, la Iglesia católica se enfrenta a retos únicos. El aislamiento geográfico, las diferencias culturales y los recursos limitados hacen que la labor misionera sea a la vez esencial y difícil.
En el norte de Kenia, la Iglesia católica se enfrenta a retos únicos. El aislamiento geográfico, las diferencias culturales y los recursos limitados hacen que la labor misionera sea a la vez esencial y difícil.